El secretario de Medio Ambiente y Sostenibilidad de la Generalitat, Josep Enric Llebot, ha advertido hoy al Gobierno central de que poner sobre la mesa de nuevo un posible trasvase del agua del río Ebro a otras cuencas sería abrir la caja de los truenos.
Llebot ha asegurado que aunque el ministro de Agricultura, Miguel Arias Cañete, no habló específicamente del trasvase del Ebro, ha subrayado que el nuevo gobierno central tendrá que concretar cuáles son sus planes en materia de política hidrológica.
Arias Cañete anunció la pasada semana en el Congreso que «abordará» el Pacto Nacional del Agua, que se plasmará en un nuevo Plan Hidrológico Nacional, con el objetivo de garantizar el suministro de agua «en calidad y cantidad» y de manera «solidaria».
También dijo que se revisarían «todos los planes de demarcación hidrográfica y potenciará la reutilización y depuración», en coordinación con las Confederaciones Hidrográficas y las Sociedades de Agua.
«Lo primero que se tiene que hacer en el conjunto de España es hacer los planes de gestión de las cuencas. El único que está aprobado es el de Cataluña, por lo que plantearse ahora un Plan Hidrológico Nacional, o es muy prematuro, o ya está hecho y no tenemos información sobre ello», ha añadido el secretario de Medio Ambiente.
En cualquier caso, Llebot no cree que ante la necesidad de sacar adelante los planes de cuenca, el Plan Hidrológico sea la principal urgencia del ejecutivo.
Llebot ha avanzado además que el conseller de Territorio y Sostenibilidad, Lluis Recoder, se reunirá el próximo día 20 de febrero, con Arias Cañete.
Además de temas de política hidráulica, se prevé que aborden la posible reforma del Plan Nacional de Calidad del Aire, del que depende la creación el programa para etiquetar los coches según sus grados de contaminación, esencial para crear las zonas de exclusión de tráfico en ciudades como Barcelona o Madrid. EFE