Las reservas del sistema Júcar se encuentran a unos niveles impensables. En concreto sólo son comparables con los de los años 70. Y es que a las abundantes precipitaciones del año hidrológico recién culminado se ha unido una gestión «prudente» con los usuarios.
Con unas reservas en el sistema de 1.000 hectómetros cúbicos y 560 hectómetros cúbicos en el pantano de Alarcón las perspectivas son más que halagüeñas. «Esto nos garantiza que en los próximos años no vamos a tener ningún problema siempre que sigamos con esta gestión», detalló Moragues.
En cuanto a la revisión del Plan Hidrológico del Júcar reconoció que no es de los más fáciles de desbloquear. No obstante, señaló que el plan se encuentra en la media de los demás.