El Gobierno regional ha tenido que paralizar las obras de varias depuradoras que se proponía construir en municipios como Alcalá del Júcar y Jorquera después de comprobar que los terrenos donde se iban a levantar estas infraestructuras eran inundables y está buscando, en estos momentos, espacios alternativos.
En estos términos se pronunció ayer el delegado provincial de Industria, Energía y Medio Ambiente, Emilio Sáez, en referencia al reciente encuentro mantenido sobre este asunto con los representantes de Ecologistas en Acción, que la semana pasada anunciaron que llevarían el proyecto de estas depuradoras, cuatro en total, a los tribunales por considerar que incumple la legalidad vigente y no es viable desde el punto de vista medioambiental.
Igualmente, el delegado provincial señaló que la planta de residuos que se quiere instalar en Villar de Chinchilla, cuya puesta en marcha también ha sido cuestionada por los ecologistas, se encuentra en la actualidad «en fase de evaluación», por lo que «no sabemos cuál será el resultado definitivo», aseguró.
Emilio Sáez compareció en rueda de prensa junto al delegado de la Junta de Comunidades en Albacete, Modesto Belinchón, para informar de las nuevas líneas de ayudas para instalaciones de energías renovables en Castilla-La Mancha, de las que podrán beneficiarse ayuntamientos, mancomunidades, asociaciones, comunidades de bienes y particulares.
En total, la Junta destinará a esta convocatoria de subvenciones, cuyo plazo de solicitud se extiende hasta el próximo 30 de abril, un importe de 2,9 millones de euros.
Entre los sistemas que tendrán derecho a ayudas, que equivaldrán a un porcentaje de en torno al 30% de las inversiones, figuran aquellos que utilicen tecnología solar-térmica de baja temperatura, biomasa térmica, biogás, suministro de biocarburantes, geotermia o plantas solares fotovoltaicas.