La Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo rechazó ayer la petición de la Generalitat de modificar el trayecto del trasvase del Júcar-Vinalopó, diseñado por el Gobierno de Rodríguez Zapatero.
“El debate ya no necesita ser reabierto, al estar encauzado el problema y existir un proyecto en marcha que resulta más satisfactorio que el anterior”, según consideró en su conclusión la Comisión de Peticiones de la Eurocámara.
El Consell, por el contrario, afirmó que dispone de nuevos informes científicos que desaconsejan el nuevo trazado, por considerarlo inviable, además de las peticiones de los usuarios y regantes, que a su juicio también lo rechazan.
El conseller de Infraestructuras y Transporte, José Ramón García Antón, anunció una batería de preguntas a la Comisión Europea pidiendo explicaciones. “Vamos a seguir dando la batalla, porque no entendemos que la Comisión se desentienda para dar satisfacción a un determinado grupo político”, manifestó García Antón.
“El grupo socialista está presionando para que no se vuelva a hablar del asunto, a pesar de que sabe que este proyecto no es viable”, agregó. Para el conseller, los socialistas aplicaron “el rodillo” para crear una mayoría de votos contrarios a que se reabra la denuncia que presentó el Consell contra el nuevo trazado.
Tanto el Parlamento Europeo como la Comisión manifestaron su apoyo al nuevo trazado elaborado por la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, y justificaron su apoyo porque entienden que respeta la normativa europea y disminuye el impacto ambiental.
“Aunque aún se deben cumplir algunas normativas comunitarias, consideramos que el nuevo proyecto limitará los daños medioambientales del trasvase al situar la toma en el estuario del río y no en la mitad de su curso, además de que evitará la sobreexplotación actual de los acuíferos”, señaló el representante de la Comisión, Giorgios Peroulakis.
Los regantes también mostraron su indignación. La Junta Central de Usuarios del Vinalopó, Alacantí y Consorcio de Aguas de La Marina Baja lamentó el rechazo del Parlamento Europeo y manifestó que su decisión se apoya en “argumentos única y exclusivamente demagógicos”. Explicaron que se ha comprobado “cómo las razones técnicas, económicas, medioambientales y sociales aportadas no han sido tenidas en cuenta”. La nueva documentación que ha aportado la Junta Central de Usuarios es un informe de más de 600 páginas elaborado por cuatro universidades y coordinadas por la de Alicante.
El secretario general del PSPV, Joan Ignasi Pla, calificó de “bofetón al PP” la decisión de la Eurocámara de no reabrir el examen sobre el trazado y dijo que esta resolución supone un “fracaso” para la Generalitat. Esta decisión es “la culminación del despropósito más grande en la historia de la Comunitat, que es intentar que la UE no financie el trasvase”, dijo.
El delegado del Gobierno en la Comunitat, Antoni Bernabé, manifestó que la UE “ha vuelto a apoyar el trasvase Júcar-Vinalopó y a respaldar la política hídrica del Gobierno de Rodríguez Zapatero”.