El ministro de Agricultura, Miguel Arias Cañete, pondrá rumbo a Bruselas a negociar la reforma de la Política Agrícola Común (PAC) con el respaldo unánime de todas las autonomías españolas. Así lo destacó ayer la consejera de Castilla-La Mancha, María Luisa Soriano, que estaba convocada a una reunión en el Ministerio con el resto de consejeros autonómicos. «Estamos de acuerdo en la propuesta que va a llevar el ministro en relación con la reforma de la PAC», anunció nada más salir del encuentro.
En concreto el asunto que se debatía ayer tenía que ver con el grado de simplificación administrativa que supuestamente trae la nueva PAC que quiere implantar el comisario de Agricultura europeo, el rumano Dacian Ciolos. Las regiones españolas coincidieron ayer en que no ven esa simplificación por ninguna parte. «No estamos de acuerdo con la reforma de la PAC, sobre todo en el asunto que hoy hemos tratado», explicó, «lo que esta reforma presenta es muchísima más burocracia y papeleo».
El apartado de burocracia es sólo uno de los frentes que Castilla-La Mancha tiene con la nueva PAC. Las organizaciones agrarias de la región también demandan que se suba el presupuesto comunitario para agricultura, que se vuelva a los mecanismos de intervención en el mercado para casos excepcionales o que se exija a países terceros los mismos requisitos medioambientales y de seguridad alimentaria que se imponen a los agricultores castellano-manchegos.
En la reunión entre el ministro y los consejeros que se celebró ayer también se habló del tiempo… sobre todo de la sequía. La consejera anunció que Arias Cañete ya está trabajando en posibles medidas que se podrían adoptar en el futuro. Soriano resaltó que los cereales suelen estar protegidos por los seguros, pero que podría haber más problemas con el pasto.