Durante la tarde de ayer, alcaldes y representantes del PP de varios municipios del Alto Vinalopó mantuvieron una reunión en Villena para tratar, entre otros asuntos, del trasvase del Júcar-Vinalopó.
El encuentro fue impulsado por la alcaldesa de Villena, Celia Lledó, quien pretende liderar un plan de acción conjunto para tratar de contrarrestar algunas de las decisiones tomadas por la Administración socialista y que afectan a localidades como Villena, Biar, Beneixama, Cañada, Campo de Mirra, Salinas o Sax.
Los representantes del PP presentarán tanto en los municipios que gobierna (Villena, Biar y Cañada) como en los que son gestionados por el PSOE (Beneixama, Sax, Campo de Mirra y Salinas, éste último en coalición con el PP), una moción en la que expresarán su negativa a convertirse en receptores de caudales de agua procedente del Azud de la Marquesa.
Esta propuesta fue tratada ayer por la Corporación villenense en la comisión informativa de Urbanismo y será aprobada en el pleno que se celebra la próxima semana. De esta forma, el Ayuntamiento de Villena será el primero en revocar el acuerdo suscrito por los anteriores gobiernos socialistas de la comarca, solicitando agua del Júcar para el baldeo de calles.
Primera piedra
Esta reunión coincide con el acto que se celebra hoy en Llosa de Ranes, donde se va a proceder a la colocación de la primera piedra de uno de los tramos de la nueva conducción Júcar-Vinalopó, con la presencia de destacados representantes de las instituciones gobernadas por el PSPV, como el presidente de la Confederación Hidrográfica del Júcar, Juan José Moragues o el consejero delegado de AcuaJúcar, José María Marugán.
A la misma hora en que se coloca la primera piedra en Llosa de Ranes, los representantes de la Junta Central de Usuarios del Vinalopó, L’Alacantì y Consorcio de la Marina Baixa, encabezados por su presidente Andrés Martínez, tienen previsto visitar la sede de la Confederación Hidrográfica del Júcar en Valencia para hacer entrega de una extensa documentación en la que, entre otras cosas, se aportan informes contrarios a la toma desde el Azud de la Marquesa, elaborados por diferentes expertos de universidades españolas y valencianas. Esta postura es la que ha venido manteniendo la Junta desde que se conoció el nuevo trazado.