Los eurodiputados han votado su versión de la reforma de la Política Agrícola Común, una versión que define la posición que va a tomar el Parlamento Europeo en lo que queda de negociación. Y esta vez no sólo tiene voz, sino que también tiene voto. En el pleno de ayer en Estrasburgo, los eurodiputados votaron a favor de una PAC más suave de la que plantea el Ejecutivo de Bruselas. Parte de esa suavización la proponen para lo que se conoce como greening, que son los requisitos medioambientales que se exigen para cobrar un 30% de las ayudas y que se resumen en tres obligaciones:la rotación de cultivos, el mantenimiento de pastos permanentes y la creación de áreas de interés ecológico en al menos el 7% de la superficie agrícola.
El Parlamento Europeo propone «flexibilizar» el greening. Plantea que se exima a las explotaciones de menos de 10 hectáreas de la obligación de rotar los cultivos, al igual que las plantaciones arbóreas permanentes, como los olivares o los frutales. Además, las plantaciones de entre 10 y 30 hectáreas podrán rotar sólo dos cultivos. La posición de la Comisión era más dura y proponía imponer la rotación obligatoria de tres cultivos a las plantaciones por encima de las tres hectáreas.
La Eurocámara también sugiera que el primer año de aplicación de la nueva PAC, las explotaciones de más de 10 hectáreas sólo dediquen el 3% de su superficie a áreas de interés ecológico y no el 7%. A partir del 1 de enero de 2016, éstas tendrían que abarcar el 5% de las tierras cultivables y la Comisión presentaría para marzo de 2017 un estudio sobre la viabilidad de incrementar este índice hasta el 7%.
Otro de los cambios que recomienda el Parlamento Europeo es minimizar el impacto de la reforma de la PAC en los ganaderos sin tierras al vincular de forma generalizada los pagos directos a las hectáreas de superficie. Los eurodiputados plantean que los pagos se suban del 10 al 15% en el caso de los asociados a la producción, en detrimento de los vinculados a las hectáreas. Ahora queda culminar las negociaciones con las otras dos patas de la UE, el Consejo y la Comisión. La negociación debería comenzar a principios de abril para llegar a un acuerdo en junio.