Los regantes y los agricultores de Sagunto afectados por la oleada de robos de contadores han encontrado una solución práctica a su problema: contadores de plástico o hierro de fundición.
Estas instalaciones, que realizan una función similar al de las infraestructuras que existen actualmente en los campos, no contienen cobre y, por tanto, carecen de atractivo para los ladrones de este material tan valioso que después venden en el mercado negro.
Según informó el presidente de la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA) en Sagunto, Francisco Campillo, los afectados tratan de contactar con mercantiles que fabriquen este producto.
«Estamos buscando empresas del sector que hagan este tipo de contadores de plástico o hierro de fundición, porque no contienen cobre y pensamos que con la instalación se esta maquinaria se evitarán los robos», explicó Campillo.
Otro punto a favor de estas infraestructuras es su menor coste, ya que están construidas con materiales «mucho más baratos», apuntó el representante de AVA.
En la actualidad, existen en Sagunto dos contadores de grandes dimensiones que están fabricados con hierro de fundición y «estos no han sufrido ningún robo». La idea ahora es renovar los tradicionales que llevan cobre por estos más prácticos y menos susceptibles de ser sustraídos. Y es que los daños que han ocasionado los hurtos en las instalaciones agrícolas ha afectado y mucho al sector.