Los regantes tradicionales del Júcar han roto momentáneamente el clima de colaboración con la Confederación Hidrográfica del Júcar, dependiente del Ministerio de Medio Ambiente, a la que acusan abiertamente de ser cómplice del incumplimiento del Plan Hidrológico del Júcar (PHJ) y de actuar en beneficio de Castilla-La Mancha.
Los regantes de USUJ han decidido presentar un recurso contra la concesión de aguas superficiales del Júcar para Albacete en tanto que este ayuntamiento y la Confederación Hidrográfica del Júcar, que tramita el expediente, no reconozcan que la concesión debe estar subordinada al cumplimiento del Convenio del embalse de Alarcón.
El citado convenio, contemplado en el artículo 24 del PHJ, permite el uso por terceros de las aguas reguladas en este embalse siempre que no se encuentre por debajo de la «curva de reserva» establecida en favor de los regantes valencianos, que construyeron y pagaron Alarcón.
Incluso por debajo de esa curva otros usuarios pueden disponer del agua de Alarcón siempre que indemnicen a sus propietarios-los regantes valencianos- por el coste que tienen extraer agua de los pozos en lugar de recibirla sin cargo alguno a través del río.
Este convenio, firmado por los regantes de USUJ y el Ministerio de Medio Ambiente en julio de 2001 no es reconocido ni por el Ayuntamiento de Albacete, ni por los regantes manchegos ni por la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha.
La gota que ha colmado el vaso de la paciencia de los regantes de USUJ y ha roto el ambiente de colaboración con la CHJ ha sido la «desaparición» del condicionante que vinculaba la concesión de Albacete al cumplimiento del convenio.
Según USUJ ha sido la Confederación Hidrográfica del Júcar quien «de oficio y sin oir a los interesados en el expediente», entre ellos USUJ, «ha eliminado» del expediente la propuesta de condiciones que figuraba en los documentos oficiales.
USUJ asegura que apoya el Plan Hidrológico del Júcar y todas las actuaciones incluidas, incluido el abastecimiento a Albacete, aunque condicionado al cumplimiento del convenio.
Confianza rota
Más allá del contenido del recurso, el escrito presentado por USUJ es un aviso dirigido a la CHJ y al Ministerio de Medio Ambiente. Afirman que «ante la territorialización del problema del agua, especialmente grave en Castilla -La Mancha, hemos querido confiar en una administración central fuerte y objetiva» pero «desde hace años» la Confederación Hidrográfica del Júcar y el Ministerio de Medio Ambiente «se están dejando arrastrar» por «la presión de los medios de comunicación que se hace desde Castilla-La Mancha».
Los regantes afirman que han denunciado en la CHJ «todos los incumplimientos del Plan Hidrológico del Júcar que se producen en Castilla-La Mancha con la colaboración de la propia Confederación Hidrográfica del Júcar».
USUJ asegura por último que el PHJ está siendo objeto «de graves incumplimientos por parte de la Confederación Hidrográfica del Júcar» y «siempre en beneficio de los usuarios de Castilla-la Mancha».
«A partir de ahora-advierten- nos vemos obligados a utilizar los mismos instrumentos que Castilla-La Mancha y hacer una campaña permanente en los medios de comunicación con los temas de agua y nuestras reivindicaciones para intentar equilibrar la posición» de la CHJ y el Ministerio de Medio Ambiente.
Albacete ha obtenido el agua potable de pozos situados muy cerca de la ciudad. La explotación salvaje del acuífero ha hecho descender casi 70 metros el nivel del agua y empeorado notablemente su calidad. El ayuntamiento quiere ahora una concesión sobre las aguas reguladas en Alarcón que ya utiliza, pero sin reconocer previamente el Convenio que regula su uso. En 2005, 2006 y 2007, la sequía hizo que el agua almacenada en todos los embalses del Júcar fuera insuficiente para los usuarios tradicionales (USUJ). La CHJ liberó entonces de los embalses del Júcar 247 hectómetros cúbicos reservados a USUJ, de los que Albacete utilizó 29,3 hm3. En Valencia hubo que extraer agua de los pozos pagando una elevada factura eléctrica y se produjeron mermas de cosecha. La indemnización girada por la CHJ asciende a 1,09 millones de euros. El Ayuntamiento de Albacete no ha pagado y ni siquiera recurre la liquidación, simplemente la ignora. j. s.valencia
Albacete no reconoce el Convenio de Alarcón
Albacete ha obtenido el agua potable de pozos situados muy cerca de la ciudad. La explotación salvaje del acuífero ha hecho descender casi 70 metros el nivel del agua y empeorado notablemente su calidad. El ayuntamiento quiere ahora una concesión sobre las aguas reguladas en Alarcón que ya utiliza, pero sin reconocer previamente el Convenio que regula su uso. En 2005, 2006 y 2007, la sequía hizo que el agua almacenada en todos los embalses del Júcar fuera insuficiente para los usuarios tradicionales (USUJ). La CHJ liberó entonces de los embalses del Júcar 247 hectómetros cúbicos reservados a USUJ, de los que Albacete utilizó 29,3 hm3. En Valencia hubo que extraer agua de los pozos pagando una elevada factura eléctrica y se produjeron mermas de cosecha. La indemnización girada por la CHJ asciende a 1,09 millones de euros. El Ayuntamiento de Albacete no ha pagado y ni siquiera recurre la liquidación, simplemente la ignora. j. s. valencia