El presidente de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), Juan José Moragues, afirmó que la situación en la cuenca del Júcar «sigue siendo delicada», ya que, según dijo, «tres años de sequía no se resuelven con una semana de lluvias». No obstante, matizó que las precipitaciones de estos últimos días han supuesto «un ligero alivio» que, «podría empezar a ser moderado» si sigue llovMoragues se expresó en estos términos en una rueda de prensa ofrecida tras la presentación del ´Plan Nacional de Restauración de Ríos´ en la Mesa Informativa de la Cuenca del Júcar, en Valencia, donde también intervino el director general de Agua del Ministerio de Medio Ambiente, Jaime Palop.

En este sentido, explicó que ha habido lluvias «importantes» y que, «por suerte, sigue habiendo». Resaltó que «en muchos lugares han caído más de 100 litros por metro cuadrado que, «por primera vez han afectado con generalidad a toda la demarcación, aunque ha llovido más en zonas como la Safor o la Marina Alta y quizá ligeramente menos en las cabeceras de los ríos», matizó.

Asimismo, destacó que se están produciendo «aportaciones importantes» en los embalses, «superiores a las que se producían hace 15 días», de forma que, el sistema Júcar, que estaba en situación de emergencia, «está embalsando en estos alrededor de dos hectómetros cúbicos diarios, es decir, dos millones de metros cúbicos diarios, lo viene a ser cinco veces más de lo que estaba embalsando hace una semana», subrayó.

Moragues informó que la CHJ reunirá a la Comisión Permanente de la Sequía a finales de este mes de abril, que se «hará una previsión de suministros para lo que queda de año hidrológico -hasta finales de septiembre de 2007-, con absoluta garantía para los abastecimiento, la industria, el turismo y respeto a las condiciones medioambientales», aseveró.

Al respecto, añadió que «quizá» se pueda «dar una alegría a los agricultores» y «mejorar un poquito el suministro de agua de que disponen y esperan disponer, pero siempre, hablando de poco», remarcó.  

Dos años

Por otra parte, Moragues se refirió al Plan Nacional de Restauración de Ríos´ y aseguró que la CHJ «coincide plenamente» con los criterios de esta iniciativa, tanto es así, dijo, que la Confederación «hace dos años que ya empezó» a trabajar en los planteamientos que se proponen ahora a nivel nacional, y se «adelantó» a él con actuaciones que han supuesto un total de 264 millones de euros en inversiones para toda la Cuenca -Comunitat Valenciana, Castilla-La Mancha y Aragón-, señaló.

De este modo, en la Comunitat se han realizado actuaciones en Castellón para «acondicionar el margen izquierdo del río Palancia al uso público; adecuar el barranco de San José con un drenaje integral de la Rambla de Alcalá; y para recuperar el río Mijares».

Asimismo, en Valencia ha invertido en el parque fluvial del río Túria entre Villamarxant y Valencia, y en el acondicionamiento el delta del río Palancia, del paraje de la Xopera en el río Magro, de la Cueva de Buñol, del barranco de Mandor, en la Eliana y Riba roja, y del Barranco del Poyo.

En cuanto a la provincia de Alicante parte de la inversión se destinó a la restauración ambiental de los ríos Vinalopó, -en Elda- del río Amadorio, del río Gorgos, y de la rambla dels Molins; así como a las obras de restauración del río Barxell y a la recuperación del cauce y márgenes del río Tarafa, señaló.

También se llevaron a cabo trabajos de recuperación de los ecosistemas en Aragón, en el tramo del río Túria que pasa por esta región; y en Castilla La-Mancha, entre cuyas inversiones Moragues resaltó la realizada en el Júcar a su paso por Cuenca por ser, a su juicio, «la más emblemática». Así, precisó que esta actuación tiene una dotación de cuatro millones de euros «con los que se está trabajando en la integración de un canal natural de aguas bravas con el Júcar, para realizar competiciones».

Ecosistema vivo

Por su parte, Palop explicó que el ´Plan Nacional de Restauración de Ríos´ presentado y dotado de una inversión inicial de 500 millones de euros, persigue «por primera vez, –bajo las exigencias de la Directiva Marco del Agua de la UE– la recuperación del buen estado ecológico de ríos y arroyos, es decir, devolver a los cauces fluviales su estructura y funcionamiento como ecosistema vivo, como paisaje, como seña de identidad de una población y como máquina de producción de agua», apostilló.

En este sentido, Palop precisó que la primera fase del Plan, que consiste «sobre todo en limpiar», se centrará en «proteger de la acción humana» las cabeceras de los ríos y en ámbitos que presentan «cierta degradación –por estar más cerca de núcleos urbanos– e interesa recuperar».

Esto se completará con un ´Guía del Voluntariado´ que «busca fomentar la participación social» puesto que, «los ríos son de todos, no son de nadie», sostuvo Palop. Así, en los meses de julio, agosto y septiembre se organizarán grupos de voluntarios que irán a los ríos para ayudar en su conservación y mantenimiento, anunció.

Posteriormente, las medidas irán encaminadas a un ´Plan de Calidad de las Aguas´ que pretende «aumentar la calidad de las aguas, a través de su depuración», mediante convenios para co-financiar, junto con las comunidades autónomas, programas que permitan «un grado superior de la calidad del agua».

También se llevarán a cabo iniciativas para aumentar «la cantidad» además de la calidad de los ríos, con la finalidad de que «dejen de ser un canal y pasen a ser un ecosistema». Para ello, se ha elaborado una ´Guía de Criterios Medioambientales del Ministerio de Medio Ambiente´ de cómo actuar en los puntos hidrográficos, que se presentó a expertos, usuarios regantes, agentes económicos y sociales para que, con sus sugerencias, ayuden a que sea la mejor posible», concluyó.    

iendo, apuntó.