Aunque entramos en el cuarto año de sequía, el agua embalsada en el sistema del río Júcar es un 30% superior al del ejercicio anterior, por tanto, no se prevén restricciones.
Al menos esto es lo que espera el presidente de la Confederación Hidrográfica del Júcar, Juan José Moragues, que ayer detalló que en estos momentos en la cuenca se almacenan 183 hectómetros cúbicos, frente a los 142 hectómetros que había el año pasado por estas fechas.
«La situación es algo sin duda mejor este año, por tanto, -dijo- podemos garantizar sin restricciones el abastecimiento, también a las industrias y al turismo». Otra cosa, son los regadíos. Moragues añadió que «es muy pronto» para hablar de restricciones, pues acaba de empezar el año hidrológico y la campaña de riegos todavía «está a una cierta distancia».
No obstante, insistió en que gracias a la «gestión integral de todos los recursos por parte de todos los usuarios» en el Júcar se ha conseguido que, pese a estar en el cuarto año de sequía, la situación se haya mejorado. «Hemos ganado agua a la sequía, como dicen los expertos», declaró Moragues que mostró cierto orgullo porque los usuarios de la cuenca «hayamos aprendido a trabajar en esta situación de sequía».
Agua depurada
Además insistió en esa gestión integral de «todos los recursos», pues habló no sólo del agua propia del río, sino por ejemplo de los 60 hectómetros cúbicos de agua que se han ganado en la Vega de Valencia «porque hace tres años casi no se reutilizaba el agua de las depuradoras para regar y ahora se aprovecha el 40%», aseguró.
«Hablar de restricciones es hablar de algo que ya veremos en su momento si se produce o no se produce porque tenemos recursos y tenemos muchos mecanismos para trabajar con los que antes no contábamos», aseguró Juan José Moragues, que se congratuló de la gestión realizada en la cuenca que preside.