La filtración por ósmosis inversa, combinada con sistemas de biorreactores de membrana, es el mejor sistema para eliminar el 99% de   los fármacos que, por el momento, no logran eliminar las depuradoras existentes en ríos como el Júcar.
Este es el principal resultado de un proyecto realizado por técnicos del ICRA(Instituto Catalán de Investigación del Agua), la misma entidad cuyos investigadores anunciaron hace escasas fechas el haber detectado trazas de Voltarén, un antiinflamatorio, en varios ríos y tramos fluviales de la vertiente mediterránea, entre ellos el tramo donde está Alcalá del Júcar.
Aunque los expertos señalaron, en su momento, que las concentraciones detectadas no suponen un daño para la salud, si advirtieron de la  necesidad de empezar a controlar y prevenir la presencia  de esta clase de sustancias, que parecen resistir muchos de los tratamientos convencionales que se usan en las estaciones depuradoras de aguas residuales.

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