El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, se comprometió ayer a invertir en esta legislatura 578 millones de euros en el almacén temporal de residuos (ATC), que se instalará en la localidad conquense de Villar de Cañas, y a inaugurar este mismo año el tramo de la A-40 entre Talavera de la Reina y Toledo. Así lo dijo la presidenta regional, María Dolores de Cospedal, después de entrevistarse con Rajoy en el Palacio de La Moncloa, donde el jefe del Ejecutivo le trasladó que es una prioridad para el Gobierno la construcción del parador nacional de turismo en Molina de Aragón.
Durante el encuentro, Cospedal le expresó la voluntad de su Gobierno de colaborar en la planificación hidráulica nacional y le agradeció la puesta en marcha del programa para el pago a proveedores, que en Castilla-La Mancha servirá para abonar más de 600.000 facturas, por valor de 2.510 millones de euros. Cospedal resaltó el conocimientoque tiene Rajoy de los asuntos de Castilla-La Mancha y ha subrayado que la reunióm ha sido «muy fructífera y satisfactoria».
También celebró las ayudas que recibirá su región para la transformación y reconversión del viñedo, que suponen 30 millones más que lo atribuido por el anterior Gobierno socialista. Para abastecimiento de agua, subrayó los 37 millones consignados en los presupuestos generales del Estado para obras en Ciudad Real y los 13 para Toledo, que se dedicarán a infraestructuras muy necesarias para el «reequilibrio hídrico en la región».
Recordó que en el plan de infraestructuras del Gobierno para el periodo 2012-2024 están incluidas otras carreteras de interés para la región, como las autovías Linares-Albacete, Ávila-Cuenca-Teruel, Ciudad Real-Puertollano, la que unirá las comunidades extremeña y valenciana y la Tarancón-Guadalajara.
Respecto al AVE, resaltó los 150 millones previstos en la provincia de Albacete, dentro de la línea Alicante-Murcia, y ha reiterado el deseo del Gobierno de unir Madrid y Lisboa por alta velocidad, un proyecto al que no renuncia pese a la negativa transitoria del Ejecutivo luso.
El parador, una prioridad
Rajoy se comprometió con Cospedal a construir durante esta legislatura el Parador de Molina de Aragón, proyectado tras el incendio sufrido por la zona en 2005 en el que murieron once personas. Según desveló Cospedal, este parador es la prioridad del Ejecutivo para esta legislatura junto al de Muxía (A Coruña). «Hay otros en cartera, pero en crisis hay que establecer prioridades», reconoció la presidenta castellano-manchega.
Según recordó, esta infraestructura es una obra «muchas veces prometida y nunca puesta en marcha» y servirá para revitalizar una zona «de gran belleza y tradición cultural», además de un valor medioambiental que hay que recuperar tras el incendio. Además, el presidente del Gobierno también se comprometió con la líder del PP en Castilla-La Mancha a que antes de que finalice 2012 acudirá personalmente a inaugurar el tramo de autovía entre Talavera de la Reina y Toledo, una infraestructura «muy deseada».
En el plano de infraestructuras, la presidenta de Castilla-La Mancha recordó que la comunidad ocupa «una parte importante «del centro de la Península, por lo que «además de destino final es un cruce muy importante de caminos». Por ello, insistió en la importancia de potenciar las comunicaciones de esta región «con un gran potencial y posibilidades» y ha puesto como ejemplo los 150 millones previstos para inversiones en Albacete para la línea de alta velocidad entre Alicante y Murcia.
Una parte muy importante del encuentro estuvo centrada en el tema del agua, respecto al que Cospedal reconoció a Rajoy la «preocupación» de Castilla-La Mancha sobre la situación hidrológica nacional y mostró su compromiso con un plan nacional que garantice el agua para todo el territorio. La presidenta castellano-manchega sostuvo que en España existe agua «suficiente» pero «no bien distribuida» y apostó por desarrollar un plan estructurado que no tenga como «eje vertebrador» el «enfrentamiento» entre comunidades autónomas. «Estoy convencida de que somos capaces de hacerlo y de pactar con el PSOE si usamos menos demagogia y nos podemos a trabajar», defendió.
Cospedal reconoció que también es necesario un reequilibrio hídrico dentro de Castilla-La Mancha y en este sentido están orientadas las infraestructuras previstas en los Presupuestos Generales del Estado, que prevén obras hidráulicas para derivar agua del Tajo al cauce del Guadiana, entre otras. «Castilla-La Mancha es una comunidad en la que su Gobierno durante 30 años apenas apostó por una planificación hidrológica y obras para aprovechar el agua», censuró antes de poner como ejemplo que, de cada cuatro litros de agua que pasan por la comunidad, uno se pierde. «Cuando alguien se posiciona totalmente en contra de los trasvases también tiene que pensar que sin ellos no llegaría agua del Tajo a Toledo o del Guadiana a Ciudad Real», sostuvo.
Durante su reunión con el presidente del Gobierno, Cospedal también tuvo oportunidad de agradecerle el plan de pago a proveedores puesto en marcha por el Gobierno, para el que Castilla-La Mancha ha presentado facturas por valor de 2,510 millones de euros pendientes desde el año 2008.
La versión del PSOE
Como era de esperar, la versión del PSOE sobre el resultado de la reunión celebrada ayer en la Moncloa fue muy distinta. La portavoz de la Ejecutiva Regional del PSOE de Castilla-La Mancha, Cristina Maestre, lamentó que la presidenta regional, María Dolores Cospedal, «sigue entregada a la consigna partidista, en vez de defender verdaderamente los proyectos que son importantes para los ciudadanos de la región».