El Gobierno de Mariano Rajoy ha aprobado unos presupuestos claramente restrictivos con el Medio Ambiente, la Agricultura y la Pesca, lo que también se ha trasladado al presupuesto global para la Comunidad Valenciana en estas materias. El ministerio prácticamente queda reducido a la mínima expresión, manteniendo la tónica de 2012 cuando las inversiones cayeron un 55%. Con todo, las partidas dirigidas a infraestructuras para asegurar el suministro de agua se fundamentan en Acuamed, la empresa pública que construye las desaladoras y las instalaciones necesarias para reutilizar las aguas residuales. Por tanto, salen de la compañía pública y no de la caja ministerial.
El total de la inversión de Acuamed se eleva a 111 millones, en las tres provincias valencianas, repartidos principalmente en la Marina Baixa, Torrevieja y Oropesa. El mayor esfuerzo se hará en las plantas desaladoras, que tanto criticó en su día el PP. Del trasvase del Ebro, que parece olvidado en el tiempo, y de reivindicaciones históricas como la presa de Vilamarxant nada se sabe.