La revelación por parte del secretario del PSOE murciano de que el Ministerio de Medio Ambiente estudia una opción para enviar al Segura agua del Tajo desde Extremadura ha destapado la caja de los truenos en aquella comunidad. Primero fue el Gobierno extremeño quien negó que esa posibilidad se haya planteado «porque en este momento no toca». Ahora lo ha hecho la Federación de Regantes de la cuenca del Tajo, que reunió el pasado viernes a su junta directiva para advertir de que no existen sobrantes de agua en el curso bajo del Tajo, entre Castilla-La Mancha y Extremadura. El vicepresidente de este organismo, Francisco Gómez Rodulfo, declaró ayer a este diario que ellos también sufren sequía.
Además de Extremadura, el Ministerio estudia, a nivel técnico, las opciones del Jarama y del Tajo medio para resolver definitivamente el déficit del sureste, según publicó ABC.
En la actualidad, los pantanos del Tajo almacenan 5.200 hectómetros, la mayoría en territorio extremeño. Si se suman además las reservas del Guadiana, el volumen total almacenado en esa comunidad roza los 9.000 hectómetros, según cálculos conservadores. La situación en el seno de la Federación de Regantes del Tajo -que agrupa a unos 90.000 agricultores, principalmente del norte de Extremadura y de la comarca de Talavera- se ha complicado en los últimos días debido a la dimisión de su presidente, Ramón Delgado Cid, «por temas personales». El sucesor provisional, Francisco Gómez, negó ayer que el relevo tuviera que ver con el ofrecimiento que hizo su antecesor a los regantes murcianos de vender toda el agua que quisieran.
Según declaró el dirigente de los regantes del Acueducto Tajo-Segura, Francisco del Amor, el dimisionario le comunicó en varias ocasiones que «tenían los pantanos llenos» y que estaban «dispuestos a vender toda el agua que hiciera falta, porque les sobraba».
Ahora el mensaje es otro, según los nuevos responsables de los regantes del Tajo. Tras la reunión que mantuvieron el pasado viernes emitieron un nota advirtiendo de que «no ha existido una oferta oficial por parte nuestra de vender agua al Segura», explicó ayer Francisco Gómez. «Negamos que en el norte de Extremadura existan excedentes de agua, ya que también sufrimos periodos cíclicos de sequía». En tercer lugar, indicó que «somos solidarios con el problema del agua en Murcia y el sureste, pero es algo que debe resolverse a nivel nacional». Por ello, califica de «inviable» un trasvase del Tajo al Segura desde los grandes pantanos de Extremadura.
6.000 hectómetros sobrantes
Los estudios técnicos que sirvieron de base al Plan Hidrológico indican que se puede disponer en Extremadura de una media anual de 6.300 hectómetros sobrantes. Así figura en Los Análisis de los sistemas hidráulicos (página 83), donde se hace constar además que el flujo del Tajo en la frontera tiene una media de 9.000 hectómetros al año, de los que hay que descontar los 2.700 hectómetros que deben entrar obligatoriamente en Portugal, según el Convenio de Albufeira.