El presidente de la Diputación de Albacete destaca que «este verano, se han visto muy pocos camiones cisterna por nuestros pueblos» para dar suministro a las poblaciones
El presidente de la Diputación, Pedro Antonio Ruiz Santos, hizo ayer un balance de los últimos 12 meses ante un nutrido grupo de alcaldes de la provincia. Y, de todas las cosas que se han conseguido, hay una, reconoció, que le ha hecho una ilusión especial.
«Este año, hemos visto muy pocos camiones cisterna por los pueblos -dijo con ilusión- y eso ha sido gracias al convenio de obras hidráulicas que hemos suscrito con la administración regional y, personalmente, me ha gustado muchísimo ver cada vez menos cubas por nuestros municipios».
Ruiz Santos pronunció estas palabras ante alcaldes de todas las tendencias políticas, procedentes de las comarcas de Mancha Centro, Manchuela y el corredor de Almansa-Monte Ibérico. Un logro del que, a su juicio, todos deben sentirse orgullosos.
«En cosas como el agua, pero también los caminos, el saneamiento, importa muy poco el partido -afirmó- porque nosotros, los alcaldes, tenemos en común que somos los primeros que reciben las peticiones, las sugerencias y, a veces, las broncas de los vecinos, y ahí tenemos que estar, atentos a lo que nos exigen».
En lo tocante al convenio de aguas, señalar que se firmó por primera vez en el año 2005, con una inversión de 9,5 millones de euros en tres años, que se tradujeron en 40 actuaciones en 32 municipios de la provincia.
El convenio se renovó en abril de este mismos año. Su montante asciende a 5 millones de euros, y comprende una larga lista de obras de redes de distribución y saneamiento en un total de 23 municipios de la provincia.
Ruiz Santos destacó también otros logros del último año. Entre ellos, y casi al mismo nivel que el de la mejora de las redes de agua y saneamiento, destacó el notable esfuerzo que se ha hecho para mejorar la red viaria provincial.
«En todo caso, este año ha sido de mucho esfuerzo y trabajo -concluyó el presidente- y el futuro es incierto, pero todos nosotros, alcaldes, tenemos la obligación de estar al lado del vecino, hay que levantar ese ánimo».