El portavoz de Xúquer Viu, Francisco Sanz, advirtió ayer sobre la «intensidad» y el alcance que están teniendo las presiones de Castilla-La Mancha en el debate abierto para la elaboración del nuevo Plan Hidrológico del Júcar.
Según Sanz, que hablaba en representación de la Mesa por el Júcar, «todos los colectivos de Castilla-La Mancha actúan de forma coordinada y todos tienen muy claro un modelo de explotación del río que puede impedir la recuperación del Júcar que se derivaría de la aplicación de la Directiva Marco del Agua».
La Mesa por el Júcar, que reune a Xúquer Viu, regantes, representantes municipales, sindicatos, grupos ecologistas y colectivos ciudadanos, ha denunciado estas presiones, así como las que se ejercen desde la Junta de Usuarios del Vinalopó, «con el apoyo del Gobierno valenciano, sin querer entender que el Júcar es un río deficitario».
«La sobreexplotación del Júcar es el principal problema ambiental del río y supone igualmente una amenaza a los regadíos tradicionales de la Ribera», añaden en un comunicado en el que recuerdan que tanto Xúquer Viu como otros componentes de la Mesa pel Xúquer, han pedido reiteradamente que se declare sobreexplotado el acuífero».
La Mesa pel Xúquer exige que el nuevo Plan de Cuenca, actualmente en redacción, «unos caudales ecológicos adecuados que el anterior plan no contemplaba».
Para la mesa, lograr en 2015 un «buen estado ecológico de las masas de agua» ha de ser el principal objetivo del nuevo plan de cuenca que sustituirá al «denigrado» plan vigente de 1997 «que consagra la sobreexplotación del río».