José Pascual Fortea, presidente del Sindicato de Riegos de Sueca, miembro destacado de USUJ (Unidad Sindical de Usuarios del Júcar) , rechazó ayer el «tono» y el «fondo» de las exigencias en torno al trasvase Júcar-Vinalopó manifestadas por Andrés Martínez, en representación de los potenciales usuarios de esta infraestructura, reclamando que el agua del Júcar que llegue al Vinalopó tenga la misma calidad que la que iba a llegar de Cortes de Pallás. «El último en llegar -al Júcar- no puede pretender ser el primero», declaró Fortea. «El trasvase se hizo para llevar sobrantes al Vinalopó y la calidad del agua será, en todo caso, la misma que disfrutan los regantes del Júcar y con la que riegan sus cosechas».
Sobre la posibilidad de que la Junta de Usuarios renuncie a usar aguas del Júcar una vez terminadas las obras, José Pascual dijo que sería una posición «difícil de entender». «Muchos pensaríamos que es que no hay tanta sed como dicen y que en realidad no necesitan el agua. Y es una pena, porque a unos pocos kilómetros, en Orihuela, otros valencianos la necesitan y estarían encantados de quedársela toda».
Por su parte, un portavoz de Xúquer Viu, Francisco Sanz, recordaba que en de julio denunciaron a Europa los últimos «movimientos» en torno al trasvase. «La Comisión Europea ya sabe que el Gobierno está siendo presionado para que destine agua del Júcar para usos urbanos en las zonas costeras, a la especulación en definitiva, olvidando la misión del trasvase», explicó Sanz.